miércoles, marzo 02, 2005

Mac Gyver vive: La historia real

No acabábamos de reponernos del hilarante incidente relatado hace un par de posts, cuando escuchamos algo que, al menos a mí, me resulta cuasi inenarrable. La sola evocación del hecho aún provoca que broten lágrimas de risa de mis ojos. Pero dejémonos de eufemismos y vayamos al grano.
Lentamente, todo volvía a la monótona normalidad. Sin embargo, el Pancho dejó escapar unas carcajadas. Con el Novato nos miramos queriendo entender el chiste, y decidimos preguntarle a Frankfurter cuál era el motivo de su actitud jocosa. No se había cagado de la risa ni mucho menos, por lo que imaginamos un chiste de mitad de tabla para abajo, de esos que caen pronto en el olvido y que según las estadísticas son seguidos por risas falsas en un 80% de los casos (estudio realizado por Mancuello, L., Harvard University Press, 2002).
Ante nuestra predecible pregunta, el Pancho respondió: "no, me río de que un amigo del Pelado se llama MAGUIVER". Después de unos segundos de silencio durante los cuales no supimos cómo reaccionar, la carcajada fue tan grande y la risa tan fuerte como para escupir las cervezas que estábamos intentando tomar.
"¿Quéeeeeeee?", espetamos al unísono, demostrando de forma más que clara que nuestra capacidad de raciocinio no concebía la existencia de un individuo que tuviera la desgracia de llevar ese nombre, o mejor dicho, la existencia de dos padres que decidieran nombrar a su hijo igual que el personaje encarnado por Richard Dean Anderson, literalmente cagándole la vida al fruto de su unión carnal.
Las risas duraron cuarenta y cinco minutos reloj (no me pregunten qué minutos no son reloj). Simplemente no podíamos parar de mearnos de la risa de un pobre flaco que se llamaba Maguiver. Porque ni siquiera era Mac Gyver, era EL MAGUIVER, el Magui para los amigos del barrio, un personaje entrañable, de esos que se encuentran poco en la vida y son difíciles de olvidar.
Es hora de buscar los por qué, los cómo de esta historia fascinante que logró mantenernos cuarenta y cinco minutos riendo ininterrumpidamente. Vayamos por partes.
TEORÍAS
Tratamos una y otra vez de descifrar el momento de iluminación de los padres, o de uno de ellos, para terminar bautizando a su hijo con ese nombre. A saber:
Teoría número uno: la estupidez
Madre- Che, Héctor, estuve pensando unos nombres para el nene, a ver qué te parecen...
Padre- Dale, contame qué tenías en mente.
Madre- Y... me parece que Ignacio sería un lindo nombre, está muy de moda y queda bien con el apellido. Tal vez podemos ponerle Sebastián, o Andrés, que también me gusta... qué decís viejo?
Padre- Mmmmmm, sí, yo qué sé, están bien esos nombres, pero... YA SÉ, tengo uno mejor, uno que va a romper todo... qué te parece Maguiver?
Madre- Quéeeeee???
Padre- Sí, sí, Maguiver, como el de la tele, de última Ignacio se llama el primo, así que Maguiver es mejor.
Madre- Bueno, sí, me gusta... Maguiver López.
Teoría número dos: la dulce venganza
Padre- Este hijo de puta me cagó la vida, ahora se la voy a cagar a él.
Oficial del Registro Civil- Cómo se va a llamar el nene?
Padre- Maguiver. Maguiver López.
Oficial del Registro Civil- Con ge o con jota?
Padre- Pero qué pregunta más tarada... con ge mijo, no quiero que lo jodan en la escuela.
(El Oficial del Registro Civil se cae como en las historietas de Condorito).
Teoría número tres: la toma de conciencia
Madre- Y pensá papá que si no sabemos ni qué nombre ponerle, tampoco vamos a poder decidirnos en qué escuela inscribirlo, la mutualista, los juguetes....
Padre- Pah, pero es un huevo ser padre, eso ni Mac Gyver puede che...
Madre- Ahí va, Maguiver... así se va a llamar el nene.
SITUACIONES
También nos imaginamos las diferentes situaciones por las cuáles este individuo pudo haber pasado a lo largo de su vida, desde sus días de purrete hasta la actualidad. Surgieron varias.
Situación número uno: las anécdotas
Maguiver (dirgiéndose a alguien que no sabe su nombre)- Entonces tenía solo un alambre para desactivar la bomba que iba a explotar en segundos, pero por suerte di una vuelta carnero, calcé la suela de mis Pampero en el dispositivo activador y con el alambre entre los dientes salvé a la humanidad....
Interlocutor- Pará papá, quién sos, Mac Gyver?
Maguiver- Pues efectivamente (Maguiver saca la cédula de la billetera y todos se cagan de la risa).
Situación número dos: presentación del primer día de clases
Maguiver- Bueno, yo tengo 8 años, soy de Maroñas, mi papá es albañil y mi madre ama de casa. Me gustan los dibujitos animados y jugar a la pelota con mis amigos, y soy de Danubio.
Maestra- Ahhh, qué bonito, pero cómo te llamás?
(Maguiver se pone a llorar y se va corriendo).
Situación número tres: al otro día en la escuela
Compañeros- Che, por qué no dijiste tu nombre el otro día?
Maguiver- Por qué es medio raro, pero si me prometen que no se ríen se los cuento, ta?
Compañeros- Obvio, cómo nos vamos a reír? Dale, dale, contá.
Maguiver- Bueno, me llamo Maguiver.
Compañeros- Jajajajajajajajajjajajajajajajaajajajajajajaja
Situación número cuatro: en el boliche
Maguiver- 555 7985, ese es mi teléfono, lo anotaste?
Chica del momento- Obvio que lo anoté, me encantás y te voy a llamar seguro, pero por quién pregunto?
Maguiver- Pedí por Juanchi
Chica del momento- Ahhh, te llamás Juan entonces?
Maguiver- Más o menos.
Situación número cinco: en el Registro Civil
Maguiver- Me quiero cambiar el nombre.
Oficial del Registro Civil- Sólo podemos acceder a su pedido si el caso lo amerita. Cómo se llama ud.?
Maguiver- Maguiver López.
Oficial del Registro Civil- Vaya si lo amerita... digame, cuál quiere que sea su nombre de ahora en más?
Maguiver- Mario Barakus.
Oficial del Registro Civil- Ah pero vos sos bobo o te parió Walt Disney?
Maguiver- Qué te pasa hijo de puta?
(Se arma una gresca generalizada y Maguiver sale herido y lo peor de todo.. con el mismo nombre con el que había entrado).
Pobre Maguiver. En el fondo debe ser un buen tipo. Daría mi vida por charlar con los viejos y que me contaran cómo llegaron a la decisión de ponerle así. También por hablar con el actor de la serie y contarle la enorme repercusión que tuvo en Uruguay. No sé, si algún día Maguiver, y te hablo a vos ahora Magui, si algún día llegás a leer este post por favor comunicate conmigo.

Quebrando una lanza por Jorge Drexler

Más allá de que el tipo hable en vez de cantar, me siento obligado a quebrar una lanza por él.
Tuvo unos huevos enormes a la hora de enfrentarse a la Academia cuando tenía que hacerlo, craneó una movida que sacudió bastante más de lo esperado los estamentos hollywoodenses, específicamente los latinoamericanos a nivel musical, creando una solidaridad pocas veces vista (Antonio Banderas prácticamente le pidió permiso para interpretar su tema), y ganó una notoriedad que no hubiera logrado callándose la boca. Además, mostró gran personalidad en el momento de recibir el premio, saliéndose del libreto y dejando su huella en el Teatro Kodak de Los Ángeles.
Por todo eso, salú Jorge, enhorabuena por el premio, dejaste bien parado al país. Lo lamento por Milton Wynants, ahora tenemos un nuevo ídolo (copyright Camilko).
He dicho.

martes, marzo 01, 2005

El Robaplata ganó un Oscar

Todo puede pasar, todo. Mi abuela tenía razón, "hay de todo como en la viña del señor". Mi viejo estaba en lo cierto, "hay de todo como en botica" Es tan verdad que hay de todo y que todo puede pasar, que JORGE DREXLER GANÓ UN OSCAR!!!
Para mí que es joda. Por algo no lo dejaron cantar a él, porque sabían que iba a hablar y no a cantar, y en Hollywood no son tarados ni mucho menos. La prueba de que para Drexler cantar es lo mismo que hablar es que cuando le dieron el premio y tuvo que dar el discurso recibiéndolo, se puso a "cantar". Al menos él nos hacía creer que estaba cantando, pero en el fondo estaba hablando, como en todos sus discos.
Nadie lo podía creer. Ni sus familiares. Se juntaron en la casa del padre, Gunther, a ver la ceremonia. Cuando vieron cantar a Antonio Banderas, dijeron que ya estaban cumplidos... Y claro, era la primera vez en la historia que alguien iba a cantar (no hablar) una canción compuesta por su hijo. Tan es así que Diego Drexler, hermano del galardonado, dijo: "Esto para mí es el Maracanazo". Pobre Obdulio.
Para mí que el premio no fue a la mejor canción, fue a "el tipo que más tiempo viene robando la guita haciéndose el que canta sin que nadie se dé cuenta", reconocimiento que los integrantes de la Academia nunca pensaron que llegarían a otorgar, pero no contaban con Jorgito Drexler.
Ahora el hombre, previa estrategia comercial de lloriqueo ante los medios porque no lo dejaron cantar su tema, se prepara para vender discos en el siempre difícil mercado norteamericano. Por lo visto, Jorgito va a ser nuevamente nominado al premio que ganó hace cuestión de días, y, teniendo en cuenta los antecedentes, es favorito a ganarlo.
Me alegro por él, pero seguro que no más que mi abuela, quien desde el cielo se debe estar regocijando ante la comprobación más irrefutable de sus dichos que jamás haya podido presenciar, viva o muerta.